Pasaron 18 años largos años de aquella terrible carrera en San Marino, aquel 1 de mayo de 1994, que se cobró la vida de Ayrton Senna, quizás uno de los mejores pilotos de la historia, junto a Juan Manuel Fangio.
Dieciocho años pasaron y todavía se sigue recordandolo por todo lo bueno que hizo tanto dentro como fuera de las pistas. Más allá de que su muerte no quedó clara porque fue, sí sirvió para que la seguridad en los autos sea lo que se ve hoy, un lujo.
La curva Tamburello fue la cruel testigo de la muerte de Senna, pero también del nacimiento del mito. En vísperas de ese GP el día viernes, también falleció el austriaco Ronald Ratzemberg, en la curva Gilles Villeneuve.
Los amantes del automovilismo sienten mucho la ausencia del piloto brasileño, porque toso coinciden que desde el 1 de mayo de 1994 nada fue igual en el deporte motor.
Genio y figura. Uno de mis pocos ídolos del deporte
ResponderEliminarGracias Diego!!!, la verdad que además de gran deportista, fue un gran tipazo
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